miércoles, 15 de septiembre de 2010

torta de domingo a la tarde


Cuando llegó el momento de juntar las lágrimas de despedida, de esas despedidas que no tienen ningún regreso más que recuerdos que quedan embalsamados sutilmente y una anda buscando lo que ya no es...
...entonces estuvieron ellos.
Ellos eran chicos, eran de amistad constante, como lo siguen siendo.
Y andaban por ahí. Iban, venían , se quedaban, volvían.

Y van creciendo pero para mí siguen siendo chicos. Andan todos circulando por Facebook como Dios manda hoy en día.

Y llegado el domingo, desparramando éxitos y algún fracaso de infaltable fútbol llenaban la casa con gritos y sudores, y les acerqué muchas veces esta sencillísima torta de limón............


Con dos huevos y una taza de azúcar,

una de leche y media de aceite y la ralladura de un bonito limón
y todo bien batido le agregamos medio kilo de harina leudante
y cuando esté como una crema espesa... al horno mediano en un molde de torta no muy grande.

Y lista ... y se la comían caliente, tan contentos........................ qué bueno.

Qué bueno que estuvieron muchas veces................. los quiero.
¿Son los amigos de mi hijo?

... son todos, un poco mis hijos.

Gracias por haber estado tantas veces.

2 comentarios:

  1. Adoro las tartas de limón y esta parece tan sencilla de hacer y tan rica, que el domingo sale como postre para el café.
    Pero más aun me gustó el recuerdo a los amigos de tus hijos, me trae a recuerdos propios tan queridos.
    Preciosa etapa que queda marcada en las paredes de la cocina o el comedor diario.
    Un fuerte abrazo. Te sigo visitando.

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  2. es así.... hoy me despedía de un departamento y pensaba cuántas emociones están debajo de la pintura nueva de sus paredes........yo también te sigo visitando.... un abrazo

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